Como niños regresando a su primer día de clases, unos cohibidos, otros asustados y claro no faltaron los protagonistas que se quisieron hacer los osados tratando a como diera lugar de llamar la atención, así llegaron los nuevos diputados federales a San Lázaro en su primera presentación.  

Buena parte de los mexicanos aplaude que terminó la legislatura que convirtió el recinto legislativo en una verdadera carpa de circo barato pues la mayoría de los legisladores y legisladoras no respetaron, como se debe, la tribuna y tampoco trabajaron por el bien del país, se dedicaron a cuidar los intereses de sus partidos y de ellos mismos, nada más.   

Como infructuosa, inútil y que no dio buenos resultados, así es como califica buena parte de la ciudadanía a los diputados de la pasada legislatura federal que estuvo compuesta con personajes sin conocimiento, diputados que le costaron mucho a México y no sirvieron de nada a la nación.  

Razón por la cual se esperaba que la nueva legislatura, los diputados recién protestados, tuvieran, aunque fuera un poco más nivel, pero no, lamentablemente para los mexicanos tal parece que no habrá mucha diferencia entre los que se fueron y los que llegaron.  

De entrada no se vio mucha diferencia entre la legislatura que feneció a la que inició, porque igual se ve a un montón de diputados y diputadas que aún no saben ni la importancia del recinto y la razón por qué se le debe respetar, al menos esa fue la impresión que dieron en su primer aparición.  

Parecían niños chiquitos, escolapios en su primer día de clases y con juguete nuevo que a todos querían mostrar y las múltiples fotografías en redes sociales no se dejaron esperar, todos los nuevos diputados aparecían mostrando su mejor atuendo y hasta prometiendo que ellos si trabajarán, pero a muchos desde un avión se les notaban sus ganas de solo el espacio para sus intereses utilizar.  

A diferencia de los niños en su primer día de clases que irradian inocencia, a muchos diputados a su llegada a San Lázaro se les ve maldad, parece que aprovecharán el puesto para lucrar o promocionarse para otro puesto de elección popular alcanzar, muestras su soberbia y ganas de pelear en lugar de conciliar y llegar a buenos acuerdos por el bien de sus representados fue lo que evidenciaron muchos de los nuevos legisladores. 

En ese tenor anda la mayoría diputados federales desde su primer día en el recinto legislativo al tomar protesta, donde en teoría se comprometen a defender los intereses de la patria y del pueblo y legislar por el bien de la gente, pero que a leguas se ve que su único interés es defender los intereses de su partido y los propios.  

Claro, no se puede negar que también hay uno que otro bien intencionado, disciplinado, que quiera hacer su trabajo correctamente, quizá igual con la intención de trascender políticamente, pero eso es lo de menos, lo de más es que no sean uno más como tantos diputados con gestión inútil.   

Entre los nuevos diputados que solo querían figurar, para variar no podían faltar tamaulipecos, pues igual se vio a uno que otro que quiso hacerse notar, incluso se mostró letrero que la verdad en ese momento estaba fuera de lugar pues era el tiempo de toma de protesta, cabildear y ponerse a trabajar no de comenzar a pelear o utilizar el espacio para mostrarse y promocionarse.  

En fin, la situación es que inicio la nueva legislatura federal, los diputados y diputadas en la toma de protesta andaban peor que niños chiquitos con juguete nuevo, lo bueno es que ya se fueron todos los inútiles, lo malo es que igual desde ya se ve que no habrá mucha diferencia, muchos de los que llegaron mostraron en su primer día más su ambición que sus ganas de trabajar por sus representados y la nación.  

Rosa Elena González

Es Licenciada en Relaciones Públicas. Ha colaborado con editoriales en El Mercurio.
Actualmente su columna Vida Diaria se publica en el Portal HOYTamaulipas y los periódicos La Verdad de Tamaulipas, Expreso, La Extra, La Voz de Tula, El Tiempo de Mante y Astronoticias, El Bravo de Matamoros y Canal 10